Shoulders to the wheel!

Para leer este blog en español pincha aquí.

So now that we all know what we are doing, we need to know how to do it, and that can be a whole other kettle of fish.

Talking is easy, but putting it all together and making it work on the screen is completely different. We all understand what we’ve been talking about, but we’re interpreting the visual concept in a different way. If we want to work as a team we need to visualise the project, so we all know what we need and what is our aim. Some storyboarding would be useful…

Ok, so we need a lot of people (mental note: have an audition!), and we need a studio (start making phone calls), AND we need a big glass ceiling (Do we need a greenhouse?). This starts to look difficult, but we love challenges, don’t we?

The storyboard has been an important step forward for the project. We’ve realised how important the CGI (Computer Generated Images) will be and our meetings with the specialist in computer graphics have revolved around the storyboard. Meetings… this reminds me that evening in March when the director said: “Welcome to the night shift!” Long evenings in the office and early coffees in Camden around a table plenty of drafts… The best thing about this is that no one loses their optimism, there’s always someone able to put a smile in your face even when everything goes wrong.

Eventually, we’ve realised that we need to make some changes. How can something that we created to help us turn against us? We’ve been too obsessed with reproducing an accurate version of the storyboard, and that’s the problem. We can adapt the storyboard to our necessities, so let’s try to start with the creative thinking and redefine the shoots.

First of all, we still have some problems visualising the proposed video. We’re used to moving pictures, and a piece of paper doesn’t help too much.

Lets move it!

Making this has helped us notice that we’re missing some really important stuff, the sound!

Now it’s time for some decision making. First of all our actors. But that’s a different problem…

If you want to get more information about the project “Speak out against discrimination”, click here.

For more information about Spectacle, click here.


¡Manos a la obra!

If you want to read the English version, click here.

Así que ahora que sabemos qué estamos haciendo, lo que necesitamos saber es cómo hacerlo, y esto puede resultar incluso más complicado.

Hablar es muy fácil, pero reunir todas las ideas y hacer que funcionen en pantalla es otra cosa muy distinta. Tal vez todos sabemos de qué estamos hablando, pero lo estamos interpretando visualmente de formas muy diferentes. Si queremos trabajar como un equipo, tenemos que visualizar el proyecto del mismo modo, así todos sabremos qué necesitamos y cuál es el objetivo final. Puede que un poco de storyboarding ayude…

Está bien, entonces necesitamos un montón de gente (nota mental: ¡convocar un casting! ); necesitamos un estudio (empezar a hacer llamadas), Y necesitamos un gran techo de cristal (¿comprar un invernadero?). Esto empieza a ponerse difícil, pero nos encantan los retos, ¿verdad?

El story ha resultado ser una pieza clave para empezar a mover el proyecto hacia adelante. En los últimos años no han sido pocos los que me han dicho lo anticuado que es el concepto de storyboarding, lo poco que se usa actualmente, y sin embargo creo que a nosotros nos ha sido muy útil para ser conscientes del berenjenal en el que nos estamos metiendo. Ahora sabemos cuánto vamos a depender de los “efectos especiales” (que nadie se asuste, esto no es una película de acción hollywoodiense) y nuestras reuniones con el especialista en infografía han girado entorno al storyboard.

Ahora que hablo de reuniones recuerdo las palabras del director aquel martes de marzo: “bienvenidos al turno de noche”. Y así fue como empezamos a alargar las jornadas laborales hasta bien entrada la noche (no entremos en detalles), o a comenzar nuestros días libres con tres cafés en Camden y mil bocetos sobre la mesa. Lo mejor de todo es que nunca perdemos el optimismo, sea cual sea el nuevo obstáculo que encontramos,siempre hay alguien que consigue arrancar una sonrisa en las situaciones más desesperanzadoras. Cuando nos dimos cuenta de que este proyecto podía costarnos nuestra salud mental, caímos en la cuenta de que tal vez estábamos ciñéndonos demasiado a lo que el storyboard decía. ¿Cómo algo que habíamos creado para servirnos de ayuda se había vuelto en nuestra contra? No nos obcequemos y busquemos nuevos planteamientos, nuevos planos, alternativas a lo que hemos planeado hasta ahora… Somos gente con ideas, seguro que podemos encontrar la forma de transmitir el mismo mensaje a través de imágenes técnicamente menos comprometedoras (trabajar con cristales rotos y seres humanos tal vez no era una buena idea desde el principio).

Entonces tenemos que volver a poner en marcha el proceso creativo, pero estamos un poco bloqueados. Todavía tenemos algunos problemas para visualizar el futuro video. Somos una generación educada en un ambiente audiovisual plagado de imágenes en movimiento, y unos garabatos en un papel no ayudan demasiado…

Let’s move it!

Esto ha sido realmente útil para hacer que nos demos cuenta de que estamos olvidando algo realmente importante: ¡el sonido!

Así que ha llegado la hora de tomar algunas decisiones. Un plan de producción ayudará a saber qué necesitaremos y cuándo, y por lo tanto nos preparará para lo que tenemos que conseguir antes del día del rodaje. Antes de nada: nuestros actores. Pero eso es un capítulo aparte…

Para obtener más información acerca del proyecto “Speak out against discrimination”, pincha aquí.

Para obtener más información acerca de Spectacle, pincha aquí.